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Cómo conseguir un catálogo eficaz
Un catálogo es una herramienta moldeable a la necesidad para la que se requiera actuar, bien sea para reforzar acciones comerciales, informativas o para presentar y generar valor de marca. Esto lo convierte en un recurso esencial para empresas de todos los sectores y tamaños, que ven en él un medio eficaz para la difusión de su oferta. Sin embargo, para lograr el máximo impacto, es fundamental contar con un diseño profesional de catálogos que transmita de forma clara y atractiva los valores de la marca y los detalles de los productos o servicios. Un catálogo bien diseñado no solo impulsa la decisión de compra en manos del consumidor, sino que también potencia la percepción de calidad y confianza hacia la empresa.
Los catálogos son una herramienta relevante e influyente para impulsar las ventas de una empresa, tanto en versión impresa como en digital obtienen una conexión entre la marca y su público objetivo.
Actualmente se puede generar la confusión por creer que al contar con una tienda online (ecommerce) y tener bien definidos los servicios en la web con imágenes y una buena descripción, quizás sea un motivo para considerar innecesario disponer de algún tipo de catálogo, adaptado a la estrategia de márketing que pueda requerirse. Pero esta idea seguro cambiará cuando entendamos sus beneficios y utilidad. Veamos…
¿Qué es un catálogo y cuáles son sus partes?
Un catálogo es una herramienta de comunicación que reúne información y características de los productos o servicios a la medida de la estrategia de marketing que se requiera. Su función es impulsar una venta, aumentar el reconocimiento de marca o servir como elemento de refuerzo para el departamento comercial.
Partes de un catálogo
Tanto el catálogo impreso como el catálogo digital deben tener estructura específica y se deben cuidar ciertos detalles en el diseño y desarrollo del mismo para que la experiencia del usuario y la comunicación sean efectivas.
Crear una portada llamativa
La portada es la puerta de entrada para diferenciar y atraer la atención que dará paso a la visualización del contenido: productos, servicios, presentación, información, … El diseño de la portada de un catálogo debe ser atractiva y acorde con la identidad de la marca y su manual de estilo (guide lines).
Diseño alineado a la imagen de marca
Un catálogo debe respetar el manual de imagen corporativo de la marca. Los colores, las tipografías, el reticulado y en definitiva el estilo gráfico deben transmitir los valores de la empresa para mantener y diferenciarse de la competencia.
Orden general en su contenido, estableciendo jerarquías y de sus contenidos en general
En el diseño de un catálogo establecer un orden / criterio es básico, para conseguir una buena experiencia de usuario y como se diría en el entorno on-line una buen usabilidad. Facilitando la búsqueda de información y compresión del contenido que se difunda en cada documento, bien sea corporativo de productos, servicios o un catálogo de publicidad y diseño, facilitar la comunicación repercutirá directamente en un retorno positivo hacia el objetivo del catálogo, ventas, imagen, información, etc.
Un ejemplo estratégico a aplicar en catálogos de producto, puede ser colocar los artículos más demandados en las primeras páginas y se pueden dividirlo en secciones.
Imágenes de calidad y descripciones específicas
Lo visual siempre será lo más llamativo, por eso es importante elegir imágenes o fotografías de calidad de los productos o servicios. En cuanto a las descripciones, es importante brindar información clara, útil y concisa. En este aspecto incluir infografías, gráficas o imágenes 3D que permitan ver secciones de producto o vistas interiores, aportarán una información extra muy útil para diferenciar detalles de ventajas competitivas imperceptibles que una imagen real nunca podrá ofrecer y que serán clave para poner en valor nuestra oferta.
¿Qué debe tener un catálogo?
Para que un catálogo para empresas sea verdaderamente efectivo es esencial que ofrezca los detalles más destacables de sus productos o servicios, preservando la idea de que la información/textos que se muestren sean concisos. En función del contenido y del objetivo al que se destine un catálogo, se deben tener en cuenta los siguiente:
“Introducción y presentación de empresa”
- Índice (en caso de catálogos con cierto volumen de páginas)
- Descripciones breve
- Imágenes o fotos de calidad
- Infografías, esquemas, gráficos y tablas
- Características del producto o servicio
- Materiales de elaboración
- Instrucciones de mantenimiento
- Advertencias de seguridad
- Certificaciones
- Testimonios o reseñas de los clientes
- Precios y descuentos
- CTA (Call to action) o llamado a la acción como: “compra ahora”
- QR para ampliar información o facilitar el contacto
…¡Y a todo esto sumarle un diseño atractivo y funcional!
¿Ventajas de un catálogo digital?
Menor costes de inversión
Un catálogo impreso requiere de una inversión más elevada que uno digital, porque debes imprimir muchas copias y hacerlas llegar a tus clientes. Con el catálogo digital solo necesitarás una copia que podrás compartir por todos los medios de comunicación: web, redes sociales, email marketing, WhatsApp, … siendo descarga en formato PDF.
Se puede actualizar fácilmente
Si el equipo de marketing, dirección o gerencia necesita realizar alguna modificación, actualización, o aplicar una simple corrección sobre un precio o referencia, en un catálogo digital se puede hacer rápidamente y su difusión es inmediata. El impreso conlleva una mayor inversión y margen de tiempo para conseguir lo anteriormente citado.
Extensión ilimitada
Puede contener la cantidad de páginas que se necesiten. En el impreso tendríamos que considerar que entre más páginas más alta sería la inversión para su preproducción impresa y que siempre se está sujeto a que el número de páginas sea múltiplo de 4.
Acceso offline
Darle a los usuarios la opción de poder disponer de un catálogo digital sin necesidad de estar conectado a internet, es otra oportunidad de venta que debería ser aprovechada y potencializarse al máximo.
Mayor alcance y distribución
Con el catálogo de servicios o productos digital se puede lograr un mayor alcance, impactando clientes de grandes ciudades hasta personas en los pueblos más remotos. La distribución impresa no permite esta expansión masiva, no es viable imprimir catálogos para todo el mundo. Lo digital ha logrado poner a todas las marcas en la misma línea de juego. Ahora existe una vía para que todos puedan internacionalizar una empresa o crear versiones de catálogos en otros idiomas de una forma más sencilla, económica y global.
Reúne analíticas de interacción
Uno de los objetivos de los catálogos de empresas es enganchar al cliente, pero con una versión impresa es imposible saber quién abre nuestro catálogo, quien se interesa o quien simplemente lo tira a la basura.
Un catálogo digital permite conocer ciertos comportamientos del usuario, proporciona estadísticas de apertura, de descarga, de momentos del día con mayor tráfico y ayuda a identificar los productos o servicios más visitados, entre otros.
Incrementa el tráfico del sitio web
Los clientes interesados en comprar algo en un catálogo digital, por medio de hiper vínculos, irán directamente a visitar el sitio web de la empresa, aumentando así el tráfico de visitantes. Y si la página web o el ecomerce es rápido y funciona correctamente poder cerrar ventas o por medio de eficiente CTA´s, captar nuevos contactos comenciales.
Amigable con el medio ambiente
Evitar el uso del papel, además de ser una acción positiva para la preservación y cuidado del medio ambiente, impulsará la imagen de marca positivamente ante los consumidores. La empresa logra obtener un valor añadido de responsabilidad social (RSC) y ambiental ante su público objetivo.
¿Ejemplos de catálogos?
Uno de los factores de éxito de los catálogos es la adaptabilidad para poder elegir aquel que se ajuste mejor a las necesidades de cada empresa. Existen diferentes tipos, ninguno es mejor que otro, simplemente tienen objetivos diferentes y en función de la tipología de producto o servicio, sector y público al que se destine la oferta (B2B, B2C, Técnico, gran consumo, alto posicionamiento, …) se mostrará el producto de una manera u otra.
Catálogo de producto: documento gráfico que presenta las características de los productos de una empresa.
Catálogo de servicio: describe las ventajas, características y los beneficios de los servicios de una empresa de manera más o menos reducida o detallada, en función del tamaño de la oferta, complejidad de la misma o inversión que se quiera realizar. Igualmente siempre se puede contar con los enlaces externos para ampliar información.
Catálogo publicidad y diseño: es un concepto abierto normalmente utilizado para presentar tde manera conjunta, todo tipo de ofertas de productos y servicios con un enfoque muy abierto para público generalista normalmente B2C.
Catálogo impreso: es una herramienta básica para reforzar la labor comercial. Se imprime en soporte físico, normalmente papel para distribuirse físicamente. Por los actuales medios on-line (dispositivos móviles y velocidad de internet) también ha aparecido la opción de contar con el formato de catálogo digital que evita o complementa la impresión del documento. Estos últimos catálogos también son conocidos como e-brochure, e-catalogue, catálogo on-line, etc
Catálogo promocional: su objetivo es impulsar las temporadas de rebajas, ofertas, nuevos lanzamientos, intentar dar a conocer productos que están en lanzamiento o que no terminan de despegar. Este tipo de documentos también persigue la consecución de nuevos compradores y en ediciones focalizadas a la fidelización de clientes.
Catálogos empresas o también citados como catálogos corporativos: Este suele ir enfocado a presentar en distinto grado de profundidad y enfoque, los detalles, virtudes y capacidades de la oferta que ofrece una empresa. El catálogo para empresas es la herramienta comercial que toda empresa deben tener y que no solo sirve para presentarse ante potenciales clientes, también es un ejercicio que sirve para focalizar el discurso y la filosofía de empresa a nivel interno.
Consigue más ventas con tu nuevo catálogo.
Estás a un solo paso de conseguirlo, pero falta decidir en qué empresa delegar su creación.
¿Cómo elegir un estudio de diseño gráfico o agencia para obtener el mejor catálogo?
Puede resultar un poco confuso o complicado elegir una agencia, entre las muchas que pueden existir en el mercado, para que realicen un catálogo profesional. Pero existen una serie de aspectos que puedes evaluar y revisar antes de tomar una decisión. (…y que por supuesto, cumplimos en Mediactiu 😉
- Revisa la reputación, reseñas y la experiencia de la agencia con otros de sus clientes, contactando directamente con estos o por medio de comentarios o prescripciones en Google my bussines o redes sociales.
- Revisar su portafolio a nivel general y en concreto de su apartado de diseño de catálogos realizados.
- Analiza si el nivel de comunicación (atención, claridad, detalle, transparencia, coherencia) que ha mantenido durante el proceso del presupuesto y resolución de dudas es correcto y genera confianza.
- Evalúa los costos, en cuanto a calidad precio. No siempre lo más barato sale bien ni lo más caro es lo mejor. Y ante la duda promedia con los anteriores puntos. Si además el estudio de diseño gráfico o agencia también te ofrecen otros servicios ,este podrá ser otro factor decisivo para acertar en la elección, pues se conseguirá además una solución global que permitirá una continuidad más sólida, eficaz y ágil para el resto .